EL REFERENTE

 En la sesión de hoy redactamos la teoría del último tema del periodo académico: El Referente.

Posterior a esto el docente explicó qué es el referente y cómo se relaciona con los demás elementos del proceso comunicativo.

Referente en la Comunicación

En el proceso comunicativo, el referente es uno de los elementos fundamentales, ya que se refiere al objeto, situación, concepto, idea o fenómeno sobre el cual se habla en la comunicación. En otras palabras, el referente es aquello a lo que alude el mensaje. Es el "tema" de la conversación o el contenido del cual se está tratando. Sin un referente, la comunicación carecería de dirección y propósito, pues tanto el emisor como el receptor no sabrían sobre qué están hablando.

El referente puede ser algo concreto, como un objeto físico que se puede percibir con los sentidos (una mesa, un libro, un animal), o algo abstracto, como una idea o un sentimiento (la justicia, el amor, la paz). Su importancia radica en que organiza y centra el contenido del mensaje, proporcionando la base sobre la cual se construyen las oraciones o los mensajes no verbales.

Función del Referente

El referente tiene una función clave en la claridad y efectividad de la comunicación. Este elemento proporciona el contexto de la conversación y garantiza que tanto el emisor como el receptor estén "hablando de lo mismo". Sin un referente claro, el mensaje podría ser interpretado de manera errónea o incluso no ser comprendido en absoluto. La correcta identificación del referente es esencial para que la comunicación sea coherente y efectiva.

Por ejemplo, si el referente en un mensaje no es preciso, puede dar lugar a ambigüedades. En una conversación donde el emisor dice: "Eso está roto", sin especificar qué es "eso", el referente es confuso y el receptor no podrá comprender el mensaje con claridad. Por lo tanto, el referente debe estar bien definido para evitar malentendidos.

Relación del Referente con los Otros Elementos de la Comunicación:

1.    Emisor: El emisor es la persona o entidad que inicia el acto comunicativo. Este selecciona el referente, es decir, escoge sobre qué va a hablar y lo convierte en un mensaje codificado que será enviado al receptor. El emisor tiene la responsabilidad de definir claramente el referente para que el receptor lo pueda entender correctamente. Si el emisor no identifica o no comunica bien el referente, el mensaje puede no tener el impacto deseado.

2.    Mensaje: El mensaje es el conjunto de información que se transmite. Dentro del mensaje, el referente ocupa un lugar central, ya que es aquello sobre lo que se habla. El mensaje puede ser verbal (utilizando palabras) o no verbal (a través de gestos, imágenes, sonidos, etc.), pero en cualquier caso debe transmitir adecuadamente el referente para que el receptor lo comprenda. Un mensaje bien estructurado debe dar pistas claras sobre cuál es el referente y cómo debe interpretarse dentro del contexto de la conversación.

3.    Receptor: El receptor es quien recibe el mensaje y lo interpreta. Para comprenderlo de manera adecuada, el receptor debe identificar el referente y asociarlo correctamente con el contexto del mensaje. Si el receptor no logra identificar el referente o lo interpreta de forma equivocada, la comunicación no será efectiva. Por lo tanto, la habilidad del receptor para captar el referente es crucial en el proceso comunicativo.

4.    Código: El código es el conjunto de signos y reglas que utiliza el emisor para codificar el mensaje. Es el lenguaje común entre el emisor y el receptor, que puede ser verbal o no verbal. Ambos, emisor y receptor, deben compartir el mismo código para que el mensaje sea comprendido correctamente. El código juega un papel vital en la transmisión del referente, pues es a través de él que el referente se convierte en un concepto comprensible para ambas partes. Si el código no es compartido o entendido, el referente puede no ser reconocido, y el mensaje puede perderse en la traducción.

5.    Canal: El canal es el medio a través del cual se transmite el mensaje (puede ser auditivo, visual, táctil, etc.). Aunque el canal no tiene una relación directa con el referente, influye en la manera en que el mensaje que contiene el referente llega al receptor. Un canal inapropiado o con interferencias puede distorsionar el mensaje y dificultar la identificación del referente.

CÓDIGO EN LA COMUNICACIÓN II

 En la sesión de hoy finalizamos con la redacción de la teoría que corresponde al código en la comunicación.

Vimos los pasos para identificar el código y su relación con el contexto y el referente.

Dejo aquí la teoría para aquellos que no pudieron finalizar en clase o que faltaron a la sesión de hoy.

Identificar el código en el proceso de comunicación implica reconocer el sistema de signos y símbolos que se utilizan para transmitir información. Esto es esencial para comprender el mensaje en su totalidad y captar su significado. Aquí hay algunos pasos para identificar el código en el proceso de comunicación:

Observa los Elementos Visuales y Auditivos: Examina los elementos visuales y auditivos presentes en la comunicación. ¿Hay palabras escritas o habladas? ¿Se utilizan imágenes, gestos, expresiones faciales o música? Estos elementos son indicadores clave del tipo de código utilizado.

Analiza la Forma de Representación: Observa cómo se presenta la información. ¿Se utiliza un lenguaje específico? ¿Hay patrones en los gestos o en las imágenes? ¿Se utilizan notas musicales y ritmos en el caso del código sonoro? La forma en que se presenta la información revela el código subyacente.

Considera el Contexto: Examina el contexto en el que se produce la comunicación. ¿Dónde y cuándo está ocurriendo la interacción? El contexto proporciona pistas sobre qué tipo de código es más probable que se utilice. Por ejemplo, en un entorno de conferencia, es más probable que el código lingüístico (palabras habladas) sea dominante.

Evalúa la Intención y el Mensaje: Analiza el propósito del mensaje y qué se está tratando de comunicar. ¿Se intenta transmitir información, emociones, instrucciones o entretenimiento? La naturaleza del mensaje puede indicar qué tipo de código se está utilizando y cómo se está aplicando.

Ten en cuenta el Medio de Comunicación: Considera el medio a través del cual se transmite el mensaje. ¿Estás viendo un video, escuchando una canción, leyendo un artículo? El medio también influye en el tipo de código que se emplea y cómo se interpreta.

Busca Combinaciones de Códigos: A menudo, en la comunicación, se utilizan múltiples tipos de códigos simultáneamente para enriquecer el mensaje. Por ejemplo, en una presentación en público, el orador puede utilizar el código lingüístico mientras acompaña su discurso con gestos y diapositivas visuales.

Interpreta la Coherencia: Observa si los diferentes elementos del mensaje se complementan entre sí y si hay una coherencia en la forma en que se utilizan. Por ejemplo, si alguien está hablando sobre un tema serio pero está sonriendo de manera constante, puede haber una falta de coherencia entre el código verbal y no verbal.

EL CÓDIGO EN LA COMUNICACIÓN

En la clase de hoy comenzamos a trabajar la teoría del código en la comunicación.

Escribimos en el cuaderno el texto que encontrarán en esta entrada y hablamos un poco sobre los tipos de código y su función en el proceso comunicativo.

El Código en la Comunicación: Un Vínculo Esencial con Contexto y Significado

En el vasto mundo de la comunicación, el código es un elemento fundamental que permite la transmisión efectiva de mensajes entre individuos. A menudo pasamos por alto su presencia, pero es el código el que da forma a nuestras palabras, gestos y símbolos, dotándolos de significado y permitiéndonos compartir ideas y emociones de manera coherente y comprensible.

El código puede definirse como un sistema de signos y reglas que se utilizan para representar conceptos y transmitir información. Estos signos pueden ser palabras en un idioma, gestos en la comunicación no verbal, símbolos en la comunicación visual o incluso secuencias de pulsos en la comunicación digital. Cada código es una forma única de representar y codificar el mensaje que se desea comunicar.

Existen varios tipos de códigos en la comunicación, que se adaptan a diferentes contextos y medios de expresión. Los principales tipos de códigos incluyen:

Código Lingüístico: Este es el código más común y ampliamente utilizado, basado en el lenguaje hablado y escrito. Utiliza palabras, gramática y sintaxis para expresar significados y transmitir información.

Código No Verbal: Incluye gestos, expresiones faciales, posturas corporales y contacto visual. Estos elementos añaden capas de significado a la comunicación y pueden reforzar o contradecir el mensaje verbal.

Código Visual: Se refiere al uso de imágenes, gráficos, colores y diseños para transmitir información. Este tipo de código es frecuente en publicidad, diseño gráfico y medios visuales en general.

Código Sonoro: Utilizado en la música, efectos de sonido y otros medios auditivos. Los sonidos y la música pueden evocar emociones y transmitir mensajes sin palabras.

Identificar el código en un mensaje implica reconocer el sistema de signos utilizado para transmitir la información. Por ejemplo, en un discurso, el código lingüístico se manifestará a través de las palabras y frases utilizadas. En una pintura, el código visual se presentará a través de colores, formas y composición. Estas señales se convierten en los ladrillos fundamentales que construyen el mensaje completo.